La ventilación por presión negativa es uno de los métodos más utilizados para ventilar galpones avícolas durante climas fríos, debido a su simplicidad y costos iniciales relativamente bajos. Este sistema permite un control preciso sobre la cantidad de aire fresco que ingresa al galpón, optimizando las condiciones ambientales para las aves.

Funcionamiento del Sistema

Los extractores crean una presión negativa dentro del galpón, generando la entrada de aire exterior a través de las aberturas de ventilación. Este aire es distribuido uniformemente a lo largo del techo, donde se mezcla con el aire caliente acumulado, evitando corrientes frías que puedan afectar a las aves.

 

Independientemente del tamaño del galpón o del tipo de explotación avícola (pollos de carne, ponedoras, reproductoras o patos), el uso adecuado de entradas de aire y una presión negativa controlada permite proporcionar un ambiente saludable con un costo energético mínimo.

 

Importancia del Control de la Velocidad del Aire

Durante climas fríos, es crucial maximizar la distancia que el aire fresco recorre por el techo antes de descender. Cuanto mayor sea la velocidad de entrada del aire, más tiempo permanecerá en la parte superior del galpón, permitiendo una mejor mezcla con el aire caliente y reduciendo el riesgo de afectar térmicamente a las aves. Además, el aire más caliente tiene mayor capacidad para retener humedad, lo que favorece la eliminación de humedad de la cama.

 

Presión Negativa y Depresión en la Ventilación

La depresión en un sistema de ventilación por presión negativa es el factor clave que regula la velocidad de entrada del aire.

 

– Mayor depresión: Aumenta la velocidad de entrada del aire.

– Menor depresión: Reduce la velocidad de entrada del aire.

 

Se ha determinado que la principal variable que afecta la depresión óptima no es el ancho del galpón, sino la diferencia de temperatura entre el interior y el exterior. Si la temperatura exterior es muy baja, el aire frío tenderá a descender rápidamente, lo que podría generar zonas frías en el suelo del galpón.

 

Factores que Afectan la Trayectoria del Aire Entrante

Diversos factores, como la presión estática, el tamaño y tipo de entrada de aire, y la temperatura exterior, influyen en el recorrido del aire antes de descender al nivel del suelo. Por ejemplo, estudios indican que con una presión estática de 27 pascales y una temperatura exterior de 21°C, el aire puede viajar hasta 8 metros antes de descender. Sin embargo, si la temperatura exterior baja a -1°C, esta distancia puede reducirse a 3,3 metros.

 

Para garantizar condiciones óptimas, los avicultores deben monitorear la trayectoria del aire entrante durante las horas más frías del día, ajustando la ventilación según sea necesario.

 

Determinación de la Depresión Óptima

No existe un valor único de depresión adecuado para todos los galpones, pero generalmente se recomienda un rango de 12 a 32 pascales.

 

– Depresiones más bajas (12-20 pascales) son más efectivas en climas moderados a cálidos con aberturas de entrada grandes.

– Depresiones más altas (20-32 pascales) son más adecuadas para climas fríos con aberturas de entrada más pequeñas.

 

Para verificar la trayectoria del aire, se recomienda utilizar cintas de inspección fijadas en el techo cerca de las entradas de aire. Si la cinta más cercana a la pared lateral está paralela al techo y la más alejada apenas se mueve, significa que el aire se está mezclando correctamente antes de descender.

 

Conclusiones

La ventilación por presión negativa es una estrategia efectiva para mantener un ambiente saludable en las granjas avícolas durante climas fríos. Su correcta implementación permite mejorar la calidad del aire, regular la temperatura y controlar la humedad dentro del galpón. El monitoreo constante y la aplicación de ajustes según la temperatura exterior son esenciales para garantizar un flujo de aire eficiente y evitar estrés térmico en las aves.

Amplíe la información aquí: