Las perspectivas para el mercado avícola mundial en 2024 son moderadamente positivas, con un crecimiento proyectado entre el 1,5% y el 2%, aunque muestra una disminución en comparación con el promedio anual a largo plazo del 2,5%. Este pronóstico, presentado en el reciente informe del Rabobank, sugiere una recuperación en comparación con el modesto crecimiento del 1,1% registrado en 2023.

Ante las previsiones de caídas en los mercados de carne de cerdo y vacuno, se estima que la carne de aves y los huevos experimentarán el crecimiento más rápido en un mercado mundial de proteínas animales, proyectado para aumentar solo un 0,4% interanual. La reducción de los costos de insumos, y consecuentemente, precios más bajos para el pollo, se espera que estimulen el consumo de pollo en 2024, impulsando así el crecimiento de la industria avícola.

En cuanto a los consumidores y los precios, se prevé que la influencia del contexto económico débil continuará impulsando las decisiones de compra, y las aves de corral seguirán beneficiándose de la disminución del comercio en términos de tipos de carne y categorías de productos. No obstante, el aumento gradual de los salarios, alineado con la inflación previa, abrirá oportunidades de mercado basadas en el valor a medida que la inflación de los precios al consumo disminuya.

En términos de crecimiento regional, se anticipa que la mayor parte se dará en el sudeste asiático, Oriente Medio y América Latina, aunque a tasas ligeramente inferiores al promedio. Los productores enfrentarán el desafío de equilibrar el crecimiento de la oferta con una demanda que se espera que crezca relativamente más lento, especialmente en mercados clave como Estados Unidos, Tailandia, Indonesia, y, más recientemente, China y la Unión Europea, que han estado abordando un exceso de oferta.

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