La inesperada y llamativa nevada que el pasado fin de semana cubrió los paramillos de Santa Isabel, del Quindío, Santa Rosa y Cerro Chispas además de los Nevados del Ruiz y del Tolima, maravilló a los montañistas que pasaban por estos lugares. Sin embargo, también dejó múltiples interrogantes sobre los efectos que está generando el cambio climático en esta zona.
Este evento natural admirado en internet y reconocido como “un espectáculo de la naturaleza”, por su escasez de los últimos años evidenciaría que hay cambios climáticos que están afectando a los glaciares.
Algunos expertos y montañistas llevan décadas transitando por estos paisajes y afirman que hace más de 30 años no se encontraban con una nevada de estas proporciones.
El ambientalista y montañista, Néstor Ocampo, contó que la última nevada de grandes proporciones que presenció en esta zona fue hace unos 32 años.
“Esta es la manera como se manifiesta de manera local el cambio climático global. No en todas partes eso sucede de la misma manera”.
Simón Moreno, jefe de Parque Natural Nacional Los Nevados (PNNN), zona protegida que agrupa todos estos nevados y paramillos, dijo que esta nevada -así como otras de menor que se han observado en el último año en diferentes sectores- obedecen a condiciones atmosféricas especiales.
Según los reportes y lo observado por los guardaparques y prestadores de servicios ecoturísticos, la nieve alcanzó a bajar hasta los 4.000 msnm. “Cubrió el cráter de la olleta, paramillo de Santa Rosa y llegó cerca de cabañas como El Cisne en Caldas y a Laguna del Otún en Risaralda”, explicó Moreno.
El jefe del Parque añadió que en términos climatológicos se puede considerar una anomalía, pues se registraron valores de precipitación sólida que “evidentemente (por registros visuales e históricos) se desvían de los valores de referencia. Por ejemplo, normalmente los valores de referencia de la temperatura del aire en lugares como la Laguna del Otún siempre están por encima de los 0°C”.
De acuerdo con lo explicado con Jorge Luis Ceballos, glaciólogo del Servicio Geológico Colombiano, los glaciares están respondiendo al calentamiento global y se están derritiendo. “Los glaciares son los mejores indicadores de la intensidad del actual cambio climático, nos están diciendo qué está pasando. Vemos en el Santa Isabel la extinción inminente de un glaciar colombiano”, apuntó.
Esto lo reflejan los datos que tiene Parques Nacionales y que están relacionados con los registros de nivología (ciencia que estudia la nieve) del monitoreo glaciar realizado por el IDEAM mensualmente en el Santa Isabel. “Los centímetros de nieve acumulada han disminuido con el correr de los años hasta llegar a valores muy pequeñitos hoy en día, de pocos centímetros o muchas semanas con valores ausentes de acumulación de nieve”, dijo el líder el PNNN.